“Fue una temporada buena para nosotros. Comenzamos con récord negativo pero batallamos y pudimos lograr la clasificación. Ahorita tenemos un buen round robin”, señaló Alexi Amarista, estelar de Tigres de Aragua.
Considera que entre los bengalíes no existe presión: “Ninguna aunque comenzamos mal. Son juegos comunes y corrientes como todo partido en la temporada. Esa página la pasamos y estamos aquí muy positivos, de que podemos lograr el título”.
Amarista de por vida en postemporada pasó de los 200 hits y ha dado jonrones oportunos. Ya en la zafra regular 2022-2023 jugó 55 partidos bateando .297 (219-65) con 33 anotadas, nueve dobles, par de triples, 4 jonrones y 35 remolques: “Siempre me preparo muy bien para cada temporada en Venezuela. Mientras aporte mi granito de arena para ayudar a Tigres de Aragua, siempre será una temporada bastante buena”.
Con respecto a llegar a mil hits en la LVBP, aclaró que a sus 33 años, “por ahora no pienso en los mil hits, pero si está en los planes de cualquier pelotero que juegue. Y en lo personal, claro que me gustaría llegar”.
Aunque tiene 632 petardos en la actualidad, “hubo años cuando estaba en Grandes Ligas, que venía y jugaba en diciembre, por lo que no agarraba muchos turnos. Fueron cinco años en los que estaba así. Si hubiera jugado todos estos años completo, imagínate, tendría más de 800 hits. Y ahora son menos juegos, debido a la pandemia”.
Lee también: Denis Phipps marca historia con los Tigres en postemporada
A pesar de sus 1.68 de estatura (al igual que José Altuve), este oriental se siente orgulloso del trabajo que hizo para llegar a las mayores.
“Claro que valió la pena. Para empezar te digo que a los 16 años me di por vencido. Cuando no me firmaban decidí abandonar el beisbol para jugar sóftbol. Fue debido a los scouts en Venezuela: ‘Que era muy bajito, que no tenía chance’. Me decepcioné”, señaló.
Sin embargo, agregó rápido, “pero volví otra vez y logré firmar a los 17, gracias a Dannis Suárez, quien sí creyó en mí. Fue el único. Y luego de tres años y medio llegué a las mayores”.
Cita que la mayoría de los compañeros que tuvo en Angelinos, Padres y Rockies en sus siete años arriba en la MLB, se portaron bien: “Cuando estuve con Angels, había muchas superestrellas, empezando por Bobby Abreu, Pujols y otros. Gracias a Dios todos conmigo estuvieron súper bien ahí y asi en los otros clubes. Compartían mucho”.
Cuando se le preguntó si seguiría como técnico una vez que se retire, fue tajante: “Eso no lo he pensado todavía (risas). Tu sabes que uno cambia de idea rápido, ya que uno ha estado por años metido en un terreno. Quizás siga como coach. No sé, todavía no me ha pasado esa idea”.