La sequía culminó luego de que una lluvia roja acalló el templo del fútbol venezolano. Tras nueve años de espera el Caracas vuelve a celebrar un título en la competición doméstica, ahora la siguiente meta es bordar una nueva estrella en la ya laureada camiseta avileña.
Luchar hasta el final ha sido una constante de este elenco liderado por el DT, Noel Sanvicente, quien siempre confió en su camada desde la presentación oficial el pasado mes de enero. Esto rindió sus frutos con un nuevo campeonato Clausura, ese que no conquistaban desde la campaña 2010.
Precisamente en ese curso que inició la década a los Rojos del Ávila les tocó medirse ante el Deportivo Táchira en la final absoluta, la cual tuvo el mismo desenlace: “Caracas campeón”, allí cosieron su última estrella, la número once, esa que los consagra como el equipo más ganador del país.
Aunque los avileños a mediados de la década también conquistaron una Copa Venezuela, en 2013 para ser más específicos. En ese chance se alzaron con aquel campeonato y su rival fue nuevamente su eterno rival. Es decir de los últimos tres trofeos del Caracas todos fueron contra Táchira.
Por otra parte, el hecho más notable en esta consecución del Clausura para el Caracas es que no realizó ninguna contratación, se apostó mucho en sus jugadores jóvenes y mejor no pudo haber salido.
Anderson Contreras, Daniel Saggiomo, Richard Celis y Eduardo Fereira son parte de esa ímpetu que prevalece en el seno rojo, todos vieron acción en la final del domingo y de algún modo fueron vitales a lo largo del curso.
Contreras de 18 años se hizo un espacio en el once de Sanvicente. Además en esta final fue una pieza fundamental; dos de sus innumerables centros al área terminaron en gol, uno para que Arrieta marcará en la UCV y otro para que Villanueva silenciará Pueblo Nuevo.
Otro efectivo indispensable fue Saggiomo, lideró a los capitalinos en San Cristobal, pidió el penal que luego convirtió en y controló los hilos del juego.
Gracias a este título los avileños se mentieron en la fase de grupos de la siguiente Copa Libertadores.
Ahora, la siguiente meta es la estrella número doce y ya se concentran en la ciudad de Mérida donde se medirán mañana ante Estudiantes por la primera final absoluta de 2019, la vuelta el domingo en el Olímpico de la UCV.