El destacado y a la vez polémico jinete Iván Pimentel Jr. fue otro de los muchos que decidieron abrirse camino en el hipismo de Estados Unidos, y con 39 años de edad no se amilanó por tomar el reto y entre trabas, sacrificios y dedicación para retomar el time y la condición, logró alcanzar su primera victoria profesional con Chiquirin en la segunda carrera del miércoles en Gulfstream Park, Florida, justo en el meeting más complicado que se realiza todos los años, por tratarse de una de las zonas más cálidas de la época y las grandes estrellas de la fusta y el entrenamiento se dan cita ahí por unos cuatro meses.
El látigo zuliano llegó a Florida en septiembre del pasado año y comenzó la rutina de entrenamiento que lo llevó a debutar en diciembre justamente en ese estado, para que en su actuación número 29 pudiera lograr la tan ansiada posición, como lo es el primer lugar, en manos por cierto de otro venezolano, el entrenador Reynaldo Yánez. El jinete ya había logrado figurar con 4 segundos y 4 terceros, de los cuales 1 en cada posición corresponden al presente mes.
Desde sus inicios siempre ha sido considerado un profesional de grandes recursos y un estilo muy llamativo, lo que le permitió una campaña con un buen número de victorias, incluso de corte selectivo, montando a ejemplares de gran calidad, estando siempre entre los mejores de las estadísticas, ya que participó en los 3 hipódromos nacionales, pero sus altos y bajas lo llevaron a cometer errores que ameritaron suspensiones, siendo la más severa cuando en el 2013 le fue encontrada en su mano y dentro del aparato de salidas un artefacto eléctrico, que supuestamente la pensaba utilizar en esa carrera para estimular a su conducido, esto ameritó un castigo de dos años.
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Ahora en esta nueva etapa, bien asesorado y con una personalidad más tranquila y con la madurez propia de la edad ha prometido mostrar esa condición natural que tiene para conducir un puro de carrera, y de mantenerse dará mucha información en materia de triunfos en la tierra del Tío Sam.
